Hoy, hablando con mi camarada Delarge, debatiamos sobre los pros y los contras de "jugarse la vida" haciendo un descenso en el woodpark de Andorra, el me decia que aprecia demasiado su vida para jugarsela atentando contra las fuerzas de la gravedad y yo defendia la idea de que es mejor morir viviendo que vivir muriendo.
La vida, como tantas veces he defendido y defendere hasta la muerte, esta para vivirla, ya habra tiempo para estar muertos y disfrutar de ello, pero mientras, lo mejor que podemos hecer es estrujar la vida, aunque solo sea para tener un punto de referencia para comparar con la muerte cuando nos llegue.
Entiendo (que no comp
arto) que la prudencia o el "sentido comun" nos influya negativamente a la hora de tomar riesgos -totalmente- innecesarios, pero en esos riesgos es donde reside el alma de la vida, el elixir de la existencia. No podemos saber lo que es estar vivos sino afrontamos la muerte como algo intrinseco e inaludible en nuestras vidas. Se trata de buscar el dolor, de hallar el placer en los arañazos que te hace el vivir, de saborear el miedo y paladear el temor.
No hay mayor sensacion de vitalidad que el ver las posibilidades que ofrece la vida, explorarlas y darnos de buces contra el suelo de vez en cuando. Si evitamos todos los peligros, si sorteamos todas las dificultades en vez de luchar contra ellas, si repudiamos el riesgo, NO ESTAMOS VIVOS. Somos zombies danzando por el mundo a la espera de nuestro patetico final.
Yo no se que hay despues de esta vida, tampoco tengo demasiado interes en ello, lo que si que se es lo que quiero en mi camino por el mundo y no es mas que saborear cada matiz de sabor, olor y tacto que pueda ofrecerme, es explorar a fondo todas las sensaciones que me brinde el destino y porsupuesto, vivir cada segundo como si fuera el ultimo.
Amigo Delarge, en tu mano esta la eleccion: Vivir o sobrevivir.
Sin mas me despido de vosotros por hoy, deseando que las experiencias que vivais hoy no sean nada comparadas con las que os depara el mañana.
Saludos.
La vida, como tantas veces he defendido y defendere hasta la muerte, esta para vivirla, ya habra tiempo para estar muertos y disfrutar de ello, pero mientras, lo mejor que podemos hecer es estrujar la vida, aunque solo sea para tener un punto de referencia para comparar con la muerte cuando nos llegue.
Entiendo (que no comp
arto) que la prudencia o el "sentido comun" nos influya negativamente a la hora de tomar riesgos -totalmente- innecesarios, pero en esos riesgos es donde reside el alma de la vida, el elixir de la existencia. No podemos saber lo que es estar vivos sino afrontamos la muerte como algo intrinseco e inaludible en nuestras vidas. Se trata de buscar el dolor, de hallar el placer en los arañazos que te hace el vivir, de saborear el miedo y paladear el temor.No hay mayor sensacion de vitalidad que el ver las posibilidades que ofrece la vida, explorarlas y darnos de buces contra el suelo de vez en cuando. Si evitamos todos los peligros, si sorteamos todas las dificultades en vez de luchar contra ellas, si repudiamos el riesgo, NO ESTAMOS VIVOS. Somos zombies danzando por el mundo a la espera de nuestro patetico final.
Yo no se que hay despues de esta vida, tampoco tengo demasiado interes en ello, lo que si que se es lo que quiero en mi camino por el mundo y no es mas que saborear cada matiz de sabor, olor y tacto que pueda ofrecerme, es explorar a fondo todas las sensaciones que me brinde el destino y porsupuesto, vivir cada segundo como si fuera el ultimo.
Amigo Delarge, en tu mano esta la eleccion: Vivir o sobrevivir.
Sin mas me despido de vosotros por hoy, deseando que las experiencias que vivais hoy no sean nada comparadas con las que os depara el mañana.
Saludos.
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