martes, 16 de septiembre de 2008

(CH ) Libertad natural

Saludos, hermanos en los viajes por los parajes de nuestras mentes, a vuestros pies me pongo.

Acabo de regresar de un pequeño parentesis laboral que me he tomado despues de mucho (demasiado) tiempo. Aprovechando estos tranquilos dias me he ido a Suiza, armado con una furgoneta, un colchon y una bici. La experiencia a sido extraordinaria, mientras aqui se asaban a mas de treinta grados de temperatura, yo iba con gorro y anorak a las faldas del Jungfrau a poco mas de un par de grados. Mucha lluvia ha acompañado mis pasos y el silencio de los campos me han dado el escenario perfecto para cabilar un poco. La calma que alli se respira, el quehacer de las gentes, amantes de la naturaleza rezuma en el aire. Rodeados de los mas bellos parajes de la vieja Europa, los pequeños pueblos no desentonan y se adaptan al entorno para protegerlo y amarlo. Nadie pone en duda la potencia economica o politica de la Confederacion Helvetica, y en cambio siguen manteniendo ese trato familiar con la madre Tierra que el hombre nunca debio abandonar.
Ni sol, ni playas, ni chiringuitos, solo naturaleza exhuberante y suntuosa acompañando mi respiracion. Una salvage demostracion de poderio natural y pureza gelida que han golpeado en mi alma y se han apoderado de mi ser.
Me he descubierto mirando embobado una cima nevada o contemplando extasiado el curso de un riachuelo. Todos los tonos de verde imaginables y todos los matices de brillo de una gota de agua concentrados a mi alrededor, mirandome, riendose de mi vulnerabilidad, como un dios todopoderoso que mira a sus siervos postrados ante el. No hay razon que pueda explicar la vida, ni es necesario buscarlo, viendo la potencia que supuran esas tierras tiene uno mas que suficiente.
No se cuando volvere a sentir la paz y conexion con la vida misma de la que he disfrutado estos dias, pero os aseguro que lo hare, sea ahi o en cualesquiera de los -pocos- paraisos naturales que nos quedan. Una vez mas me pregunto en que coño pensamos cuando decidimos destruir eso por unas monedas...

Saludos.

No hay comentarios: